dimarts, 7 d’abril del 2009

- Sobre Estremecedoras Sesiones


Luces, acción... gente que sabía lo que quería, que simplemente se sacaba un peso de encima, que no les importaba nada más que el dejar que la musica fluyera por todo su cuerpo. De hecho, no era ni preocupación, se podría decir que era un momento de pura despreocupación... Chaquetas tiradas por las bancas y mesas vacías; movimientos al sonido de la melodía. Gente que se movía rápido y gente que simplemente se balanceaba lánguidamente. Pero que teníamos toda esa gente en común, que había decidido pasar la noche del lunes moviendose con cierto frenesí (como ya apunté en el post anterior, los que vivían el sí del momento así lo hacían), a la velocidad del tempo y cadacuál a su bola? De hecho, la pregunta es en sí retórica.

Dicen que los momentos más bestiales de brillantez y lucidez cerebral humanos surgen con el efecto de sustancias inhibidoras des de estados de relax a estados de sobreexcitación nerviosa. No voy a discutir eso... cadacual sabrá lo que necesita para realizar un razonamiento, válido o no. Newton necesitó una manzana en su cabeza; los Beatnik usaban LSD y semejantes; Descartes reflexionó junto a una estufa... y yo, yo necesité una completa deshidratación corporal para empezar a ver las cosas con más bien deslucidez y cierto desenfoque.

A medida que pasaba el tiempo, la sed empezaba a mellar en mi cuerpo, me sentía bajo en azúcar, necesitaba un respiro y una mar de sudor resbalaba frente abajo, saturando mis cejas. Pero yo seguía con mi imperiosa necesidad de sacar lo que tenía dentro, lo que aquella música me inspiraba. Sudaba y sudaba mucho, tenía aquella horrorosa sensación con las piernas empapadas y el pantalón pegado. Pero aquello no era suficiente para pararme, yo no pensaba, simplemente bailaba, a toda velocidad y observaba la gente de mi alrededor. Se desprendía todo de mí, sentía que perdía el control de mi mismo y que en cualquier momento podía caerme al suelo, pero por algun extraño motivo seguía ahí, dempié; aguantando y luchando por continuar con esta corriente de éxtasis que rodeaba mi cuerpo; liberándome al ritmo de la música.

Mi alrededor empezaba a ser cada vez más confuso: las figuras de la gente que me rodeaba se desvanecían entre oscuras sombras. Mis parpadeos eran cada vez más rápidos y mis movimientos empezaban a alterarse, cada vez más lentos y, a pesar de mi concentración por continuar vivo, me resultaba todo de lo más patoso. Mi cuerpo me estaba pidiendo un descanso a gritos. Tenía la frente hirviendo y el sudor era cada vez más frío. Necesitaba un sorbo de algo, necesitaba urgentemente algo líquido. Todo iba ganando definición y la volvía a perder, como el vaibén de una hoja.

Entonces una pregunta me produjo el escape perfecto de esa realidad que hasta el momento me había visto inmerso. Todo giraba a mi alrededor y yo había perdido todo el interés posible en continuar dentro de aquella jaula de posesos. Había dado el siguiente paso. Lentamente me recosté sobre mis piernas y recorrí el local en busca de un apoyo. Con esto conseguí todo lo que necesitaba. Por fin podía preguntarme el porqué de todo aquello, el sentido, el motivo por el cuál toda aquella gente se había reunido allí, me pregunté qué era lo que yo también había venido a buscar por primera vez en mi vida en un lugar como aquél.

Todo el mundo tenía su propia barrera, cadacuál ignoraba a los demás. Los que eran como yo no se molestaban por "como esto" o "como aquello". Simplemente lo sentían, lo hacían suyo.

3 comentaris:

  1. Ahhh, sí, no hi ha res com aquesta sensació d'estar a punt de palmar-la en mig d'un concert :)

    La boca seca, la vista ennuvolada, la suor freda, les cames fen-te figa... I el pitjor és que no saps si quan caiguis a terra, t'ajudaran o pel contrari et trepitjaran i t'acabaran de rematar!!

    L'última vegada que em va passar això va ser l'any passat al concert dels Rolling... I els fills de &%#@$! de la Creu Roja no em van donar ni una trista Coca Cola!! X-(

    Per cert, a quin concert de "posesos" vas anar?

    ResponElimina
  2. No sabia que escrivies així, noi. En qualsevol moment em semblava que diries alguna cosa com "allí estaba la opresión en la boca del estómago, allí estaban las ocho lunas de colores que pueblan la noche cuando me lo sugiere el etanol". En fi, les que ens queden per viure. Fins diumenge!

    PS: Que se'ns escapen els catalanismes, Anti...

    ResponElimina
  3. És el recòrd d'una sessió de Drum'n'Bass a la qual vaig assistir quan vaig ser a Amsterdam.

    ResponElimina